Yo sufrí mi primer trasplante de córnea en Abril de 1982, coincidiendo con la Guerra de las Malvinas. Yo contaba 13 años de edad.
Yo tenía un Queratocono, enfermedad congénita que deforma la córnea, adquiriendo una forma irregular, y provocando muy mala visión. Generalmente, el Queratocono es bilateral, en ambos ojos, pero se va desarrollando en el tiempo de forma muy diferente en cada ojo. El primer trasplante fue en el Ojo Derecho.
El trasplante de córnea está recomendado no sólo para los casos de Queratocono, sino para otros problemas de la córnea, como por ejemplo, provocados por un accidente. Recuerdo un caso de una chica que estaba en lista de espera, y que había recibido una pedrada en un ojo, accidentalmente, lo cual, le había provocado un problema serio en la córnea.
Para un niño de 13 años, fue muy dura la idea de tener que pasar por el quirófano, para someterse a un trasplante de córnea. Máxime cuando me dijeron que la córnea se extraía de una persona fallecida. Desde aquel momento, nos lanzamos a una campaña de captación de donantes, tanto en prensa escrita, radio y televisión local, para la creación del Banco de Ojos de La Rioja
Debo recordaros a todos que estamos hablando de principios de los años 80, donde no había ordenadores, móviles, ni por supuesto, internet. Eran otros tiempos claramente, donde la oftalmología no estaba tan avanzada como hoy en día, y tampoco la gente estaba tan concienciada en temas de donación y trasplantes de órganos, cosa que hoy vemos de forma bastante natural
Además, y como inciso, decir que actualmente, ya se está experimentando con córneas artificiales, para evitar el problema del temido rechazo
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